Por Mauro L. Muñoz

Multitudinarias movilizaciones de las comunidades educativas de todo el país colmaron las calles en una histórica defensa de la educación pública. La marcha -que tuvo su eje principal en Buenos Aires pero que se replicó en todas las provincias- fue convocada por las autoridades de las 57 universidades nacionales y tuvo el protagonismo de los jóvenes que a ellas asisten, pero también contó con el respaldo de los gremios docentes, de la CGT, organizaciones sociales, agrupaciones políticas y la sociedad en su conjunto que decidió expresar el rechazo al ajuste del gobierno de Javier Milei, tan solo un día después del mensaje presidencial que festejó el superávit fiscal a costa de «motosierra».

La masiva movilización no pasó desapercibida en Casa Rosada. El propio presidente publicó en sus redes sociales un texto titulado “Causas nobles, motivos oscuros”, reconociendo la legitimidad del reclamo pero desacreditando sus intenciones. En tanto que el gobierno insistió en la intención de auditar a las universidades, la negociación por las partidas presupuestarias sigue estancada y se decidió que sea el Secretario de Educación el que lleve la voz cantante en búsqueda de un entendimiento. Aunque los rectores expresaron su repudio al funcionario por «desinformar». Las partes se verán las caras el martes en una una reunión para intentar acercar posiciones.