En el marco del 2º Congreso Internacional de Maíz que se desarrolla en Paraná, el gobernador Gustavo Bordet instó a conformar un gobierno de unión nacional, “sobre la base de un gran acuerdo económico, político, social, empresarial, que nos permitan superar los problemas estructurales del país».
El mandatario entrerriano encabezó la apertura del Congreso que reúne a productores y empresarios del maíz. Lo hizo junto a la vicegobernadora, Laura Stratta, el secretario de Agricultura de Nación, Juan José Bahillo; al presidente de la Asociación Maizar y miembro de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), Pedro Vigneau; al CEO del Congreso, Joaquín Pinasco; y al ministro de Agricultura de Córdoba, Sergio Busso.
El evento, que se inició este martes y culmina el miércoles en el Centro Provincial de Convenciones (CPC) de la capital provincial, es organizado por las entidades ligadas al cultivo del maíz, como Maizar y La Pastelera Producciones, con el apoyo de la Región Centro.
Al hacer uso de la palabra, el gobernador Bordet destacó que fue inmediato el apoyo a realizar el congreso en Paraná, «teniendo en cuenta la importancia que tiene el cultivo de maíz en la provincia, que es el principal insumo para las cadenas de valor», de las industrias avícola y porcina.
«Entre Ríos necesita comprar más maíz del que produce y eso que se ha incrementado la superficie plantada», comentó, al tiempo que indicó que ese cultivo «es fundamental para poder abastecer nuestras cadenas de producción que generan empleo y aumentan divisas por las exportaciones».
Luego destacó que el congreso se concreta en el marco de la Región Centro, que «es un ejemplo de cómo se puede lograr en la Argentina que tres provincias durante 25 años construyan políticas públicas que vayan trascendiendo y superando las gestiones. Esto es lo importante porque en estos tiempos que nos toca vivir, donde hay múltiples problemas que todos conocemos, creo que a las soluciones las compartimos, porque quién no quisiera vivir en un país donde podamos tener un tipo de cambio único, donde no existieran retenciones a las exportaciones, donde el desempleo esté en el mínimo y en el cual se reduzca la pobreza».
A continuación, el gobernador Bordet expresó: «Lo que nos falta en Argentina, y muchas veces en nuestras provincias, es lograr los consensos necesarios para llevarlo adelante porque hace muchos años que vivimos de desencuentros y donde pareciera que el que grita más fuerte es el que tiene razón, donde pareciera que en el tiempo electoral todo vale para poder ganar una elección”.
Unión nacional
En ese punto, se preguntó “de qué sirve ganar una elección si no hay una actitud convocante a un gobierno de unión nacional”, y consideró que esa unión nacional “tiene que ser sobre la base de un gran acuerdo, económico, político, social, empresarial, que nos permita definir esas políticas públicas que sean intocables y que se puedan superar de esta manera los problemas estructurales que tiene el país».
En ese marco, afirmó que “tengo cifradas esperanzas de que se puede hacer, porque tenemos un país que tiene un gran potencial, con técnicos, con científicos, con gente de trabajo, con empresarios que quieren y aman la tarea que desarrollan, con los trabajadores que todos los días contribuyen a aportar a la producción. Entonces es cuestión de ponernos de acuerdo, creo que en tiempo de elecciones es importante poder definir esto, ya que más allá del resultado, si no hay vocación de construir un proyecto colectivo que pueda integrarnos a todos como país, vamos a seguir cometiendo los mismos errores».
«Yo tengo una visión optimista y creo que es tiempo de que nos pongamos a trabajar fuertemente en la construcción de estas políticas públicas”, subrayó luego y afirmó que “en la Región Centro lo hemos logrado, me ha tocado trabajar durante este período con gobernadores de distinto signo político y siempre nos pusimos de acuerdo para hacer lo mejor para nuestra Región, cuando había que salir al mundo por nuestros productos; cuando había que fomentar y desarrollar cultivos, en este caso el maíz; cuando había que apoyar a nuestra industria, cuando había que defender a nuestros productores. Estamos en ese camino”.
En ese marco, Bordet entendió que «el cultivo del maíz, como la agricultura argentina, tiene también grandes desafíos para el futuro. Es importante tener en cuenta las prácticas responsables de producción. Tenemos que hacer compatibles con el ambiente nuestro sistema de producción, no es una dicotomía. Hay que hacerlo y tenemos que trabajarlo unidos».
También instó a pensar «de qué manera tenemos que llegar con sistemas de riego, contamos con dos de los ríos más caudalosos del mundo aquí en nuestra Región Centro y hay que aprovechar y buscar sistemas de riego. Esto no se hace con voluntarismo, sino con políticas públicas que vayan pudiendo construir acueductos, como se está haciendo de Santa Fe a Córdoba, que fue apoyado por la Región Centro. Esto se hace gestionando líneas de crédito que nos permitan desarrollar sistemas de riego».
Asimismo, señaló que se “puede avizorar en el futuro que el conocimiento aplicado a los sistemas de producción resulta clave para poder desarrollarlos, por eso suscribo a que en los días de este Congreso internacional se pueda debatir, discutir, hacer los aportes convenientes y tener los elementos que necesitamos quienes tenemos que tomar decisiones, porque lo más valioso que se requiere es la información».
Potencialidad para el desarrollo de políticas públicas
Por su parte, Bahillo destacó la importancia de este congreso, «no creo que haya hoy en el mundo un lugar con tanto conocimiento aplicado para el desarrollo de la cadena del maíz».
Hizo notar que este cultivo «tiene múltiples usos, ya que no es sólo alimento para humanos, sino también para consumo animal, fuente de energía e insumo para la industria. Por eso, las potencialidades de este cultivo -sobre la base de la eficiencia con la cual lo producimos, el profesionalismo de nuestros productores, el desarrollo de tecnología y economía del conocimiento y la agricultura de precisión que tiene nuestra región-, son oportunidades y desafíos muy importantes en cuanto a lo que demanda el mundo».
«Este congreso será muy útil en materia de desarrollar información e insumos, no sólo para mejorar la productividad y el profesionalismo de nuestros productores, sino también para la conformación de políticas públicas», subrayó.
El maíz, una oportunidad
En tanto, el CEO del Congreso, Joaquín Pinasco, agradeció a todos los que hicieron posible el evento y aseguró que serán «dos jornadas a puro conocimiento e información», a la vez que señaló que «en lo personal me siento muy emocionado».
Destacó que en Argentina «la agricultura vuelve a tener una oportunidad, que claramente se la da el maíz por todo lo que implica, las inversiones que requiere, el efecto derrame que provoca y el conocimiento que deben tener quienes lo producen para llevarlo adelante. Y por sobre todas las cosas, porque el maíz atraviesa la humanidad, hace mucho más de 500 años».
«El maíz es desarrollo», dijo luego Pinasco y señaló que «este congreso nos obliga a estar atentos, a prestar atención. Se hablará de oportunidades, de soluciones, de avances tecnológicos y científicos, pero también se plantearán problemas, nuevos desafíos que van a requerir que todo este ecosistema, en el cual me incluyo, nos hagamos realmente cargo para siempre».
Por último, instó a los participantes a aprovechar este congreso «para ser mejores agricultores, mejores contratistas, más transformadores, más generadores de valor. Entre Ríos es una provincia que es ejemplo de eso».
Noble cultivo
Por su parte, el ministro de Agricultura de Córdoba, Sergio Busso, hizo llegar el saludo del gobernador de su provincia, Juan Schiaretti, y destacó la continuidad y alternancia que se logró dar al congreso «porque somos una región que produce un cultivo tan importante como es el maíz».
«Hicimos en Córdoba el primer congreso que dio resultados muy positivos», recordó el funcionario, al tiempo que indicó que son «necesarios estos espacios para poder proponer, discutir y aprender. Eso es lo más importante».
«Todos estamos convencidos de que el maíz es uno de los cultivos más nobles que tenemos en nuestra región, por lo que genera, lo que produce, porque le da crecimiento, desarrollo, arraigo a nuestra gente», continuó diciendo el funcionario cordobés y agregó que «a veces nos proponemos objetivos que son totalmente posibles como producir más para exportar más y tener los recursos que Argentina necesita».
Finalmente Busso manifestó que «Argentina va a salir con trabajo y producción, y para eso tenemos que ponernos de acuerdo y tener una macro (economía) que sea previsible, transparente y sobre todo permanente en el tiempo, para que la toma de decisiones puedan ser lógicas y servir a ese propósito».
Generar acuerdos
El presidente de la Asociación Maizar y miembro de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), Pedro Vigneau, valoró la realización del evento. Manifestó que “hay un mundo que vira rápidamente de lo fósil a lo renovable, y ahí el maíz sin duda tiene un rol protagónico. Por su característica puede tomar mucho más dióxido de carbono de la atmósfera que la mayoría de las plantas y transformarlo en biomasa».
«Además de tener una de las cuencas fotosintéticas más eficientes del mundo en nuestro país, tenemos un vector que es más gravitante en el desarrollo de la economía, de excepción, la capacidad técnica, los tomadores de decisiones. Los fundamentales del negocio están y esto es un fundamental clave», opinó Vigneau.
Dijo que Argentina tiene mucho para ofrecer en función de disminuir la generación de dióxido de carbono, llamando a contar estas posibilidades «y ponernos de acuerdo. Bajemos un poco la guardia, conversemos, y vemos cómo hacemos para aprovechar esta oportunidad», manifestó. Señaló que es necesario «saber qué impacto tienen las políticas en el cultivo de maíz, con la cabeza puesta en el consumidor, que hoy le pone mucho foco al tema ambiental, y tenemos que estar a la altura».
Mostró luego las posibilidades que brinda esta producción indicando los materiales de la vestimenta que llevaba puesta los cuales se producen en Estados Unidos y China. «Se debería hacer donde está el maíz con la mejor huella ambiental del mundo, acá, en Argentina».
El maíz en Entre Ríos
Para nuestra provincia, el Congreso Internacional del Maíz significa una instancia crucial que permite seguir pensando políticas públicas que ayuden a incrementar la superficie sembrada de un cultivo que tanto aporte trae al bienestar económico y social de nuestro territorio. Además, el espacio facilita la presentación de novedades tecnológicas y el debate de los desafíos de una de las principales cadenas agroindustriales del país.
Las exportaciones de maíz fueron 227.247 toneladas el año pasado, generando una importante suma de divisas para Entre Ríos con 384.000 dólares. No obstante esto, existe un faltante de aproximadamente 350.000 toneladas de maíz entrerriano para alimentar sólo a la producción avícola. Además, durante el 2022 las cadenas bovina y porcina demandaron casi 568.000 toneladas de maíz entre tambos, feedlot, cría de terneros y porcinos.
Con estas cifras, Entre Ríos es una de las únicas provincias que procesa más maíz del que se exporta en su forma bruta y además tiene que comprarle a otras provincias, para poder abastecer otras cadenas productivas.
Desde el gobierno provincial se sigue trabajando para seguir ampliando el área sembrada de maíz -teniendo en cuenta que es una provincia que necesita sembrar aproximadamente entre 100 y 150.000 hectáreas más de maíz para poder autoabastecerse. Es decir, generar el maíz que consumen las cadenas productivas y transforman la proteína vegetal en proteína animal. También es necesario contar con el conocimiento para aumentar los quintales de rendimiento, apostando para ello a un trabajo articulado entre el sector público y privado.