Sin dudas el panorama político tiene la mira puesta en Córdoba: la alianza propuesta por Horacio Rodríguez Larreta con Juan Schiaretti estabilizó el tablero y Luis Juez denunció falta de ética en las reglas del juego.

Con su humor habitual pero claramente molesto dijo “estábamos todos con botines y 20 minutos antes nos han cambiado las reglas del juego y nos dicen que tenemos que jugar al volley”.

Juntos por el Cambio está lejos de ordenarse y recuperar la calma tras meses de una feroz interna que mantiene agitados los planes de los diferentes sectores. Una clara muestra de ello fue la falta de acuerdo que hubo en la reunión de ayer en la sede de la UCR, pero también el tono de la discusión pública entre los referentes que impulsan la ampliación, con Horacio Rodríguez Larreta al frente, y los que optan por el rechazo, como es el caso de Patricia Bullrich. Pero mientras el escenario arde, el ex presidente ya jugó su primera carta en Córdoba. “Cómo vamos a acordar con el PJ cordobés después que han apoyado y han aprobado casi todas las leyes tan destructivas de estos últimos tres años, que aumentaron el gasto, los impuestos, y que nos han llevado a este nivel de inflación», dijo el expresidente este martes en declaraciones a Radio Mitre 810 (Córdoba).

En medio del debate por la incorporación del cordobés Juan Schiaretti, resistida por el «ala dura», el expresidente se sumará hoy a la campaña del senador Luis Juez en Córdoba. Con el candidato a gobernador que se enfrentará a Martín Llaryora, el candidato schiarettista, Macri tiene una relación tirante, con cuestionamientos que han aparecido públicamente.

Sin embargo, el medio del clima de fuerte tensión y disputa por los intereses que domina al espacio opositor, Macri y Juez tienen posiciones acercadas con relación al tema Schiaretti. 

El expresidente está plegado al posicionamiento de Bullrich y el senador, que ayer viajó en auto desde Córdoba para expresar su postura en la reunión de los representantes de JxC a la que no había sido invitado, también se opone con varios argumentos, pero el más fuerte es que en las elecciones provinciales debe competir con el candidato de Schiaretti, y cree que incorporarlo es incompatible.